El tiempo sigue avanzando y tú has llegado a los 30. Una edad divertida y madura en la que tienes que cuidar mucho tu cuerpo. Y no es que te estés quedando sin energías o de que estés envejeciendo rápido. Más que nada estos tips son para prevenir molestias futuras que podrían aquejarte a los 40 años. Con un poco de ejercicio diario podrás mejorar tus años 30 y disfrutar mucho más esta etapa.
Camina y trota a intervalos regulares
Te sentirás super a tus 30 realizando este ejercicio pues garantiza una gran mejora en tu salud. Lo mejor es que solo tomará menos de 30 minutos de tu tiempo. Sal al parque, ponte tus audífonos e inspírate con música para correr. Camina durante cinco minutos y después acelera 30 segundos intentando llegar al 90% de tu esfuerzo. Al terminar, trota a paso ligero durante 90 segundos y repite nuevamente este proceso al menos unas 10 veces. Si quieres un reto mayor, reduce el tiempo de descanso.
Camina
Con la ayuda de un podómetro o incluso descargando una app en tu celular con la misma función, podrás registrar el número de pasos que das al día. Lo cual es genial pues notarás de inmediato los resultados. Según los investigadores de la Universidad de Tennessee, las mujeres que caminaban al menos 10,000 pasos al día tenían 9% menos grasa corporal al llegar a los 50 años, que quienes daban entre 6,000 y 9,900. Si ya eres una chica que ya camina constantemente, entonces solo tienes que añadir algunos pasos para llegar a la cantidad mencionada en el mismo lapso. De esta manera mejorarás tu condición física sin afectar la duración de tu ejercicio.
Fortalece tu centro o core
¿Sabías que más del 50% de las mujeres de 30 años sufren dolores de espalda? Si no quieres ser una más, entonces deberías fortalecer tu centro o core. Ya que la clave para evitar estos dolores no se basa solo en la fuerza sino más bien en la resistencia. Tus músculos no deben estar demasiado fuertes para cargar tu columna, pero sí deben tener la suficiente resistencia para soportarlos.
Para fortalecer tu core comienza por hacer puentes laterales durante tres semanas. Lo único que tienes que hacer es recostarte del lado izquierdo con tus rodillas estiradas mientras sostienes la parte superior de tu cuerpo apoyada con tu mano izquierda. Recarga tu mano derecha sobre tu cadera y lentamente levanta tu cuerpo hasta formar una línea recta desde los hombros hasta tus rodillas. Mantén esta posición durante cinco a diez segundos mientras respiras profundamente. Repite cuatro veces y cambia de lado.
