Aunque la tecnología no deja de avanzar, muchas mamás nos sentimos aprehensivas en el embarazo por no poder ver constantemente a nuestro bebé. ¿Cómo saber si la gestación está transcurriendo con normalidad? Si cumples con esta lista de síntomas es seguro que vas a tener un baby saludable.
No hay cambios en tu presión arterial
Una presión arterial normal indica que a tu bebé le llega suficiente oxígeno y nutriente. Un aumento puede tener graves complicaciones para ti y tu bebé, por eso es tan importante rastrearla. Si llegas a estar entre el 8% y 10% de mujeres que desarrollan hipertensión, no te agobies. La clave está en la detección temprana para dar el tratamiento adecuado.
Glucosa normal
Aproximadamente 4% de las embarazadas desarrolla diabetes gestacional. Si no la tratas, puede tener consecuencias muy graves para tu bebé. Por eso necesitarás informarle a tu médico si tienes antecedentes y estar al pendiente durante el embarazo. Por protocolo, tu obstetra te someterá a una prueba oral de tolerancia a la glucosa en la semana 26. Si los resultados son normales, no hay nada de qué preocuparse.
Sin contracciones
Las contracciones irán variando de intensidad y frecuencia conforme avance tu embarazo. Existen tres tipos:
- Contracciones focales: Su intensidad es tan baja que ni las notarás. Ocurren hasta la semana 30 de embarazo y puedes llegar a tener hasta seis al día.
- Contracciones Braxton Hicks: Desde la semana 24 comenzarás a notarlas claramente. Son más intensas pero no dolorosas. Abarcan solo algunas zonas del útero. Podrás tener hasta 10 al día. Pueden presentarse hasta una por hora, pero más de tres por hora no es normal. Estos números son solo una referencia, comunícate con tu médico si sientes que no es normal.
- Contracciones de trabajo de parto: Son mucho más fuertes, molestas y peligrosas. Si no las inhibes puedes terminar con un parto prematuro. Estas modifican el cuello del útero y son parecidas a las de la primera fase del parto. La gran diferencia es que aún no estás en la semana correcta, por lo que necesitas comunicarte con tu médico urgentemente para decidir qué hacer. Si no las presentas antes de la semana 37, es señal de que tendrás un bebé saludable.
Las contracciones normales carecen de ritmo. Si son molestas y frecuentes, es momento de llamar a tu médico.
Hay movimiento
Cuando tu bebé alcanza cierto tamaño comenzarás a sentir claramente cómo se mueve. Esto es una señal de que está sano y reactivo. Recuéstate una vez al día y siente cómo se mueve. Si comes algo dulce antes de recostarte verás cómo se mueve más.
Tomaste ácido fólico
Esta vitamina es esencial para tener un bebé saludable pues ayuda a la formación del tubo neural que es la parte del embrión que se convierte en el cerebro y la médula espinal. Si no tienes suficiente ácido fólico puedes llegar a sufrir un aborto, dar a luz un bebé sin vida, problemas de espina bífida y anencefalia. Lo ideal es tomarlo antes de la concepción y durante los primeros meses del embarazo.
Monitoreos
Necesitarás hacerte ultrasonidos, un escaneo fetal en la semana 20, prueba de síndrome de Down y monitoreos de rutina a partir de la semana 37. Todos estos estudios de rutina son indispensables para ver si tu bebé tiene el tamaño adecuado, si desarrolló bien sus órganos y si responde a estímulos. Hay muchas enfermedades que pueden ser detectadas y hasta tratadas en tu vientre. No escatimes tus chequeos, pues cada semana tu bebé cambia radicalmente.
Recuerda que aun si hay algo mal es mejor saber y aprovechar el tiempo para prepararte. Con los cuidados adecuados podrás tener la tranquilidad de saber que tienes un bebé saludable.