Luchar contra la “gordofobia”, algo que nos concierne a todas

Desgraciadamente la sociedad ha impuesto modelos de belleza sobre nuestro cuerpo que casi siempre son inalcanzables. También es cierto que mediante una buena dieta y ejercicio puedes moldear tu cuerpo. No obstante, la estructura del cuerpo es inalterable, por tanto, si tu complexión es robusta, no hay algo que la cambie y está bien. Debemos luchar contra la “gordofobia” y aprender a amar nuestro cuerpo tal cual es. Sólo de esa manera nos sentiremos más seguras y felices en nuestra piel.

Por qué luchar contra la “gordofobia”

Como sociedad tenemos una muy mala relación con nuestro cuerpo. En este sentido valoramos poco sus capacidades, lo alimentamos de forma horrible y jamás lo entrenamos para que desarrolle su máximo potencial. Sin embargo, sí le exigimos que cumpla con estándares de belleza que ni siquiera son compatibles con su complexión ni herencia genética. Y solo para acceder a un estándar de bienestar social que nos hace más daño que bien. Por ello, es importante que abracemos nuestro ser con todo y sus imperfecciones. Obviamente de forma responsable cuidando nuestro cuerpo y dándole lo que necesita.

Qué es la “gordofobia”

Se trata de la discriminación y repulsión que se siente hacia una persona robusta o con sobrepeso. En este sentido se suele menospreciar, criticar o atacar a las mujeres con esta complexión, en especial si se arreglan más y no tienen miedo de mostrar sus cuerpos tal como son. También se adoptan diversos prejuicios en cuanto a su personalidad, hábitos, sexualidad. En consecuencia, las personas creen que tienen derecho a tratarlas mal sólo por su forma física. También las consideran indignas de su atención, amor e inclusive respeto. Les tienen tanto odio, envidia o temor, que comienzan a descalificarlas y dicen que está mal que se sientan cómodas y empoderadas con su cuerpo. En este afán de reprimirlas, incitan al odio de las demás personas a su alrededor.

Nuestro deber es empoderarnos entre mujeres

Es momento de dejar los prejuicios atrás, cuidarnos y apoyarnos de todas las formas posibles. Sólo de ese modo el mundos será un lugar mejor y no solo para las mujeres, sino para todos en realidad.  De esa manera seremos un poco más libres y felices en todos los aspectos. También cabe recalcar que una cosa es la aceptación de nuestro cuerpo y otra la consciencia que tenemos en cuanto a él. Por ello debemos mantener un estilo de vida saludable mediante una dieta balanceada, ejercicio, meditación y las citas constantes con el nutriólogo y el médico. No sólo se debe luchar contra la “gordofobia”, sino contra cualquier modo de discriminación que afecte tu calidad de vida.