La ansiedad es algo realmente complicado, te lo dice alguien que vive así día con día

Muchas veces he escuchado a diferentes personas decir que están pasando por un momento de ansiedad. Sin embargo, pocos sabemos de verdad cómo es la vida con este problema. Sin duda es una de las peores cosas que alguien puede sentir y no se lo deseo a nadie. En mi caso, la ansiedad se desató luego de un momento muy traumático. Antes de eso, yo no tenía idea de lo que se sentía o de qué podía o no hacer para controlar mi mente. Ahora, a pesar de estar en tratamiento, mi vida muchas veces se ve oscurecida por la ansiedad.

Momentos difíciles de la vida

Como dije, hace unos años tuve un momento bastante difícil. Estuve frente a la muerte y en el momento en que todo sucedía, sólo pensaba en mis seres queridos. El miedo que me invadía mientras el arma estaba frente a mí, hizo que algo cambiara dentro de mí. En ese momento me bloqueé y dejé de ser consiente de mí. A pesar del miedo, parecía que la cosa no había estado tan grave. Ya en casa, pude controlarme, aunque me la pasé llorando toda esa tarde. Tenía una mezcla de sentimientos, entre miedo, enojo y frustración.

Lo peor vino después

Aunque en el momento en que todo pasó, sentí miedo; parecía que las cosas seguían como siempre en mi vida. Como tenía miedo, opté por no salir algunos días de casa, no quería volver a pasar por una experiencia aterradora en tan poco tiempo. A pesar de todo, tuve que salir y fue una experiencia muy traumática. Ahí fue cuando supe que tenía problemas de ansiedad. Cada vez que salía fuera de casa, empezaba a tener taquicardia, no podía respirar y sentía que oprimían mi pecho. La primera vez pensé que tenía problemas en el corazón, pero la realidad era que sufría ansiedad.

Las coas empeoraban, porque ya no eran sólo los dolores en el cuerpo. Mi mente se la pasaba trabajando todo el día e incluso en las noches. El insomnio me invadía y durante el día, mi cuerpo experimentaba temblores, además de la falta de respiración y el dolor en el pecho.

Obviamente sigo en tratamiento, pero tener ansiedad no es nada sencillo. Cuando escuches que alguien tiene problemas, antes de juzgar o pensar que sus problemas son simples, asegúrate al menos de escuchar lo que le pasa a la otra persona.