La gente suele preguntar si un ataque de ansiedad o de pánico pueden causar la muerte, pero no es así, porque no puede generar un ataque al corazón. El taque de pánico responde bien, en la mayoría de los casos a los medicamentos y a la terapia cognitivo-conductual.
Porqué puede confundirse un ataque de ansiedad con un ataque al corazón
Los síntomas de ansiedad que suelen confundirse con un ataque al corazón incluyen: frecuencia cardíaca acelerada, mareos, aturdimiento, respiración rápida y superficial, presión y malestar en el pecho. Cuando se produce esta repentina oleada de sensaciones y tu mente está abrumada por el miedo, el corazón reacciona latiendo fuertemente. Como resultado, se te dificulta respirar. Naturalmente, cuando una persona se enfrenta con una avalancha de sensaciones puede concluir que se trata de algo muy grave, como un ataque al corazón.
Diferencias
Ambas condiciones presenta una frecuencia cardíaca rápida o irregular. Sin embargo, la clave está en otro síntoma: el dolor. Durante un ataque de ansiedad sentimos un ritmo acelerado y palpitaciones muy fuertes, pero sin dolor.
Los ataques al corazón, por otro lado, son algo muy serio. El músculo cardíaco deja de funcionar debido a una arteria obstruida o bloqueada. Cuando esto ocurre, el corazón se ve privado de sangre y oxígeno. Por esto, en los ataques cardíacos los cambios en la frecuencia cardíaca van siempre seguidos por un dolor extremo y opresivo. Este se manifiesta en el centro del pecho que puede radiarse a otras áreas del tórax (normalmente al brazo izquierdo).
Dolor durante ambos ataques
También durante un ataque de ansiedad se puede experimentar dolor en el pecho; sin embargo, hay diferencias con el dolor que se siente durante el ataque al corazón. Al dolor torácico asociado con problemas del corazón se le conoce como “típico” y las siguientes son sus características:
- Dolor en el pecho que va en escalada alcanzando máxima severidad después de unos minutos.
- Presión en el pecho.
- Dolor en la parte izquierda del tórax.
- Dolor que se extiende a otras zonas: brazos, hombros o mandíbula.
Por otro lado, el dolor asociado a un ataque e pánico se le conoce como “atípico” y viene acompañado de los siguientes síntomas:
- Dolor agudo o punzante en el pecho.
- El dolor es fugaz.
- El dolor que se localiza en un área pequeña.
- Este dolor que se produce sin esfuerzo.
- Dolor en el pecho que acompaña otros síntomas de ansiedad o ataque de pánico.
- El dolor que se alivia o empeora cuando cambia de posición.
- Dolor que puede ser reproducido o empeorado pulsando sobre el área del dolor.
Si te han diagnosticado trastorno de ansiedad es necesario que te sometas a tratamientos y terapias para superarlo. De igual manera es importante puntualizar que aunque no puede provocar ataques al corazón, los malos hábitos sí los pueden promover. Debido a que las personas que viven con este trastorno son más propensas al tabaquismo, alcoholismo y a la vida sedentaria, aumentan los factores de riesgo que pueden provocar algún problema en el corazón.
