Los anticonceptivos actuales tienen dos problemas: son a base de hormonas y es la mujer a la que tienen que suministrárselos. Mientras, en la Secretaria de Ciencia, Tecnología e Innovación de la Ciudad de México se trabaja un anticonceptivo masculino ¡de distintos venenos de animales ponzoñosos! Así como lo lees, se han hecho pruebas en toxinas de veneno de víboras, alacranes y arañas y tres de estas pueden tener propiedades inhibidoras de espermatozoides.
Se han probado 350 toxinas diferentes
Se trata de un anticonceptivo masculino reversible a base de toxinas halladas en muestras de veneno. Ya se han aislado 950 toxinas de víbora, alacranes y arañas y hasta el momento se han probado 350. De estas, tres se han identificado como inhibidores específicos de los espermatozoides. Dos de ellas provienen de veneno de serpientes coralillo y la otra de una cobra. ¡Increíble!, ¿no lo crees?
Pruebas
Se pretende encontrar bloqueadores de canales iónicos del espermatozoide, o sea que bloqueen la movilidad del flagelo. Así, se inyecta un producto que no permite la movilidad de los espermatozoides y que no afecte a otras células ni al organismo que los alberga. En este sentido, se trataría de un método reversible. Con el objeto de que el hombre mantenga la capacidad de fecundar al óvulo cuando este tome la decisión de suspender el uso de la opción anticonceptiva.
Una vez terminadas las pruebas preclínicas, los investigadores pretender hacer pruebas clínicas, es decir en seres humanos.
Aún no se sabe cuándo estará este anticonceptivo masculino en el mercado. Seguramente serán los hombres más valientes los que se atreverán a usarlos. Por supuesto, este tipo de anticonceptivos no prevendría contagios de transmisión sexual. Aún así, suponen un gran avance en la tecnología de control de natalidad.
¿Conoces a alguien que se atrevería a probar este anticonceptivo de veneno de víbora?
