Errores a la hora de elegir tus lentes de graduación, ¡no los cometas!

Tus lentes de graduación son como un accesorio más que usarás todos los días. Yo antes odiaba usar lentes, pero ahora es lo más cool del mundo. ¡Es mi accesorio favorito! Sin embargo, entre tantos modelos de lentes es difícil decidirse por uno solo. Y es ahí cuando cometemos muchos errores y al poco tiempo nos arrepentimos de ello, ¿verdad? Es por eso que quiero contarte cuáles los son los errores más comunes y darte algunos consejos para elegir los mejores lentes de graduación.

No hacerte el examen de la vista antes de graduarlos

Todas tenemos un número de graduación dependiendo del daño o deficiencia de la vista. Sin embargo, el uso constante de los lentes mejoran tu visión y por eso el número de graduación cambia al menos cada seis meses. No puedes mandar a graduar tus lentes con el número de tu graduación que tienes en mente. Hazte siempre el examen de la vista para que tus ojos puedan ver correctamente y mejoren más y más.

Elegir un armazón muy delgado

Me encanta los armazones delgados, aquellos que no son muy gruesos de la base del cristal. Lo malo es que las patitas del armazón son muy delgadas a veces y esto puede traer problemas. Sobre todo si eres una persona que deja sus lentes en donde sea, se te caen muy seguido o los han aplastado más de una vez. Si quieres que la base de los cristales sea delgada, entonces procura que las patitas sean gruesas, para que puedan sostenerse mejor de tus orejas.

Desconocer qué tipo de lentes va mejor con la forma de tu rostro

En ocasiones, muy ilusionadas nos probamos un estilo de lentes solo para darnos cuenta de que no se ven tan bien como a la modelo. Bueno, todas tenemos un tipo de rostro y es importante saber qué clase de lentes nos favorece. De no ser así tardarás horas y horas cada vez que quieras renovar tus lentes.