Recuperen la llama de la pasión de estas maneras

Cuando una relación se vuelve muy larga, las relaciones sexuales tienden a perder su toque. Hay más amor que pasión, en cierto modo es más lindo, porque el sexo con tu pareja se vuelve más íntimo. Sin embargo, es normal que con tantas distracciones, responsabilidades o rutinas esta conexión se esconda un poco. Bueno, ya no te preocuparse pues de estas maneras podrán recuperar la llama de la pasión.

Haz una lista de las cosas que pueden prenderte

Si quieres recuperar la llama de la pasión, no solo pienses o digas lo que te prende en ese momento. Mejor haz una lista de todas las cosas que te ponen muy caliente y ponlas a prueba. Cuando te sientes muy bien contigo misma, podrás responder de manera excelente y satisfactoria durante la intimidad. Te pongo un ejemplo muy sencillo: “Usar lencería me hace sentir muy sexy”, “me excito cuando bailo muy cerca de mi pareja”, etc. Otra excelente idea es escribir aquello con lo que no te prendes o te suele apagar de inmediato. Así te das una mejor idea de todo lo que quieres que suceda o para planear algo más interesante para ti y tu pareja.

Planea toda una noche de pasión

Hazlo con anticipación y verás que será más caliente para los dos a comparación de sí lo hacen inesperadamente. Por lo general esperamos a que sea espontáneo y que se dé apasionadamente, pero no siempre sucede así. En vez de organizar una cena romántica o pensar en las actividades del día, mejor usa tu imaginación para darle esa noche que tanto desea. Crea un buen ambiente con velas románticas, usa tu mejor lencería y pon canciones para hacer el amor, entre otras cosas. Todo depende de ti, pero también se vale buscar algunas ideas para inspirarte.

Mira a tu pareja con ojos frescos

Cuando tienes relaciones sexuales con tu pareja las primeras veces, tiende a sentirse mágico y más excitante. Después, con el tiempo, esto se vuelve más romántico pero la pasión no es la misma de antes. Un buen consejo para encender la llama otra vez es ver a tu pareja con ojos frescos. Es decir, como si fuera una persona que apenas estás conociendo y te gusta muchísimo.