Estaba tan enamorada de mi novio, teníamos muchísimo de conocernos, éramos como vainilla y chocolate, pensé que jamás me enamoraría de otra persona y ¡sorpresa! Me gustó otro chico mientras yo tenía esa relación. Ni siquiera yo me lo podía creer. De seguro has pasado esta situación. Tienes una relación estable con una persona increíble que te hace muy feliz pero por alguna razón, te gustó otro chico. No lo puedes evitar, tratas de desaparecer ese sentimiento, pero simplemente sucede. Bueno, ¿no estás tan segura de ello? Así fue como yo me di cuenta; tal vez es hora de que abras los ojos.
No dejaba de pensar en nuestros momentos divertidos
Cuando lo conocí me pareció una persona muy normal. De hecho pasó un año y medio para platicar y conocernos como lo hacemos ahora. Tuvimos varios momentos divertidos, me hacía reír bastante y no dejaba de pensar en él y en todos sus chistes. Sí, creo que el truco de “haz reír a una chica para que se enamore de ti” funcionó totalmente. Era muy divertido pasar el momento con el; más que nada porque estaba experimentando cosas nuevas.
Me emocionaba cuando me hablaba
Al principio pensé que era normal porque estaba teniendo un nuevo amigo, después me di cuenta de que mi emoción era más de la que tenía con mi novio. Mi novio y yo hablábamos todo el tiempo y realmente no teníamos algo nuevo que decirnos. Todo era miel y galletas, mientas que el otro chico era más aventuras, nuevos intereses, gustos, opiniones, en pocas palabras, un mundo nuevo.
Me daban ganas de abrazarlo, no sé por qué
Mientras más tiempo pasábamos juntos, conociéndonos como amigos y nada más, por alguna razón quería sentir su calor con un abrazo. A mi novio lo abrazaba todo el tiempo, realmente lo amaba, pero ese amor estaba disminuyendo.
Mi novio comenzó a ser muy aburrido
Me preguntaba miles de veces por qué pasaba esto. Habíamos compartido tantos momentos juntos pero de pronto las actividades que hacíamos comenzaban a ser muy aburridas. Sus temas de conversación eran igual, no había una chispa ya.
Empezamos a conocernos
Él y yo comenzamos como amigos, no teníamos un interés en comenzar una relación. Claro, después era muy obvio que empecé a gustarle con el tiempo y él a mí. Sin embargo, antes de eso nos dimos cuenta que teníamos muchas cosas en común, pero que nuestras personalidades eran diferentes. Todos estos factores prendieron una chispa entre nosotros.
Su forma de ver las cosas me pareció interesante
Sabía demasiadas cosas, era un chico muy inteligente y tenía una forma muy interesante de ver el mundo. Lo que me llamó más la atención fue que quise ser parte de su mundo.