En general soy una chica amable y me porto buena onda cuando un chico me habla. Esto lo hago porque entiendo los nervios que podemos sentir al hablarle a alguien que nos gusta. Sin embargo, me he llevado muchos disgustos con ciertos chicos. No hay algo más molesto que un hombre pretencioso queriendo llamar tu atención alardeando acerca de su dinero, lo guapo que es o la cantidad de ligues que tiene. Cada vez que sucede, pienso que todas necesitamos un detox de hombre, pero tú, cuéntame: ¿cuáles han sido la formas más pésimas de ligar que conoces?
Hacerse el interesante
Hombres, nosotras sabemos que seguramente son inteligentes, tienen una vida divertida y tal vez existan una o dos chicas que morirían por estar con ustedes. Sin embargo, esas son cosas que no nos interesa escuchar. ¡En serio: no hay algo más aburrido que ver y escuchar a un hombre enamorado de sí mismo! Ademas, si somos sinceras, cuando un hombre alardea tanto de esas cosas, nosotras nos damos cuenta de que son mentiras. Si fueran tan guapos, inteligentes y exitosos no estarían solos o inventando mentiras para tener una novia.
Los stalkers
Antes de formalizar una relación existe un periodo en el que comenzamos a conocernos. Durante este nos llamamos constantemente, también nos “mensajeamos” aunque lo que nos decimos no tenga mucho sentido. Hasta cierto punto es normal, ya que ambos quieren saber del otro. No obstante, llega un punto en el que la atención excesiva es agobiante. Además, hay chicos que son aún más insistentes cuando no les contestas, chicos, eso da miedo, relájense.
Los tibios
Hay un lugar especial en el infierno para estos sujetos. Son los típicos chicos que te tratan bien, salen contigo a todas partes y se la pasan increíble y así trancurren varios meses. Sin embargo, al momento de formalizar la relación te dicen que no están listos. ¿Es en serio? Además al inicio eran románticos y tiernos y después se pierde todo el romance.
¿Conoces a alguien así, has salido con alguno?