El decálogo para ser mejores padres día con día

Educar a un niño no es una tarea fácil. Siempre buscas la manera adecuada de enseñarle ciertas cosas. Sin embargo, a veces parece que nada da resultado. No te preocupes, existe un decálogo de aspectos esenciales que tu hijo necesita saber y aprender. Al hacerlo será un poco más consciente y empático. Vale la pena conocerlo y ponerlo en práctica. ¿Te animas?

1. Aprende a pedir perdón

Los niños aprenden con el ejemplo de sus padres y las personas que los rodean. Por eso, cada vez que cometas un error, lo prudente es que pidas perdón. Inclusive a tu hijo si ese fuera el caso. Únicamente de ese modo entenderá que aceptar su responsabilidad y las consecuencias de sus actos es lo mejor que puede hacer.

2. Habla con él de forma paciente

Los niños no son tontos, son capaces de entender cosas que ni imaginamos. Siempre que necesites hablar con él de algún asunto, hazlo como si lo hicieras con cualquier persona. No hace falta hablarle en un tono especial o que intentes mentirle para que se sienta mejor. Solo sé honesta, habla sin enojarte o emocionarte demasiado ¡y listo!

3. Necesita cometer sus errores

Es necesario que los niños cometan sus errores aunque creas que lo mejor es que no pasen por algo así. Aprenderá lo que debe hacer, lo que no y lo que tendría que pensar dos veces. Además, entenderá que debe responsabilizarse de sus actos y de las consecuencias que eso conlleva. De lo contrario, cuando sea grande no sabrá cómo reaccionar.

4. Jamás lo compares

Lo peor que puedes hacerle a un niño es compararlo con otro. Eso daña su autoestima y podría causarle problemas con el niño que lo compares. Cada uno tiene diferentes procesos de maduración, por lo que desarrollan ciertas habilidades más rápido que otras. Sin embargo, eso no es un motivo de castigo por tu parte.

5. Necesita aliento y no descalificación

Descalificarlo por aquello que no le salen bien solo provocará que pierda los ánimos de intentar cualquier acción. Comenzará a sentirse menos capaz en todos los aspectos. Por tanto, hará menos cosas o las hará de mala gana. Con el paso del tiempo hasta podría tener problemas de conducta en la escuela. Mejor, aliéntalo. Así querrá aprender siempre.

6. Haz que desafíe sus límites

Es bueno hacer que el pequeño rompa sus límites en cuanto al conocimiento en diferentes aspectos. Llévalo a talleres o cursos que realmente le agraden. Nunca lo obligues a realizar algo que no quiera. De lo contrario, provocarás que se frustre.

7. Déjalo jugar todo lo que quiera

Uno de los puntos más importantes del decálogo es que lo dejes jugar todo lo que él quiera. Recuerda que mediante el juego comprende muchos aspectos no solo de sí mismo, sino de las personas con las que convive y el entorno en el que se encuentra. Obviamente, dile que puede jugar hasta que termine sus deberes, de ese modo equilibrará sus responsabilidades y las actividades que le gustan.

8. Los límites son necesarios

A muchas madres no les parece correcto ponerles límites estrictos a sus hijos. No obstante, es necesario que lo hagan, pues solo de esa forma aprenden a convivir sanamente con otros niños y con los adultos de su casa. Tampoco es que seas muy estricta o regañona, simplemente establece límites claros e inamovibles.

9. Enséñale a controlar sus emociones

Una de las mejores cosas que puedes enseñarle es a controlar sus emociones. Si no, será un adulto que se dejará llevar por sus emociones en todo momento. Consecuentemente, tendrá problemas en el trabajo, la escuela e inclusive con su pareja y amigos. Enséñale a calmarse sin hacer berrinches cuando llora, a pedir perdón cuando haga algo mal y a no decir palabras feas cuando esté enojado.

10. Enséñale a respetar

Algo más que necesitas enseñarle sí o sí es a respetar a todos. Esto implica respetar sus cosas, sus creencias, gustos y forma de vivir. Así será capaz de convivir sanamente sin estar juzgando o criticando a los demás. En consecuencia, recibirá el mismo respeto y tendrá relaciones sanas y duraderas.