Conocí a mi hermano que no sabía que tenía

Sí, parece de telenovela, pero esto en realidad me sucedió. Gracias a este tipo de acontecimientos he comenzado a creer en el destino y en las casualidades. Hace algún tiempo conocí a mi hermano que no sabía que tenía.

El día del encuentro

Pocas veces decidía salir de fiesta en compañía de mis primas, pero esa noche estaba decidida a salir sin importar lo que pasara. Teníamos pensado ir a un evento en el centro de la ciudad, pero debido a un accidente en la zona el evento fue cancelado. A mitad de camino, una de mis primas recibió una llamada para invitarnos a una fiesta, como no nos quedaba lejos decidimos ir. Al llegar a la fiesta sucedió lo que nunca esperé que me pasara. Uno de los invitados me preguntó: “¿Oye, eres familiar de Santi, te pareces mucho a él?”. Cabe mencionar que no sabía de quién me hablaba así que lo ignoré.

Santi y yo sí nos parecíamos

Al seguir la noche, me presentaron a Santiago, quién, a decir verdad, sí se parecía mucho a mí. Esto nos hizo gracia a ambos y, al parecer, a todos los invitados a la fiesta. Esa noche intercambiamos números de teléfono y contactos en redes sociales. Teníamos muchas cosas en común, por lo que decidimos salir con amigos a patinar y a tomar fotografías. Pasaron los días y salimos varias veces. Entonces fue cuando llegó el fin de semana y pude ver a mi papá a quien solo veo algunos días.

La verdad de que era mi hermano

Le comenté a mi padre lo que había hecho esa semana y le mostré las fotos que había tomado con mis amigos. Se quedó callado por un momento, noté que se detuvo en una de las fotos en las que aparecía Santiago. Me preguntó por él y le conté todo lo que sabía. Al final sólo me pidió que le preguntara el nombre de su madre. La duda me mataba, por lo que en ese mismo instante lo llamé para preguntarle, cuando supe corrí a decirle a mi padre. Se quedó impresionado y fue cuando me dijo la verdad. Santiago era mi hermano. Mi padre había conocido a la madre de Santiago poco después de divorciarse de mi madre. Al parecer, ella se fue sin decir nada al enterarse de que estaba embarazada.

Lo que pasó después

Al parecer, su madre le contó a Santiago la misma historia que mi papá a mí. Todo checaba a la perfección y se había confirmado la información. El siguiente encuentro entre mi hermano y yo fue un poco incómodo, pero decidimos seguir tratándonos como amigos y ver a donde nos llevaba nuestra nueva relación. Nuestros padres nunca se han visto, pero él y yo solemos vernos seguido y platicar horas por teléfono. Incluso hemos salido y nos hemos presentamos como hermanos. Al parecer a los dos nos ha agradado la idea de tenernos.