Se dice que el ser humano es celoso por naturaleza. De hecho, hay personas que no los pueden dominar y pierden el control por lo que fracasan en sus relaciones. Los celos no son malos, pero hay que identificar cuando son enfermizos para solucionar el problema. Una posible solución es aprender a superar los celos, es decir, saber controlarlos y manejar las diversas situaciones que se puedan presentar. No permitas que los celos destruyan tu vida, mucho menos tus relaciones.
¿Qué está provocando los celos?
Cuando los celos te invadan y sientas que la cabeza hierve de ira, respira lentamente para tranquilizarte un poco y piensa qué es lo que te está afectado. Identifica el problema para que puedas platicarlo en pareja. Para ello, aprende a escuchar lo que te dicen. Una vez que estés tranquila, analiza si los celos que sientes son razonables. Por otra parte, gestiona la emoción, es importante que te des un tiempo y espacio calmar tus celos y el enojo. No busques más motivos para alimentar esas emociones.
No te dejes engañar por tu mente
La mente es tan poderosa que creemos que no podemos controlarla, cuando nosotros somos quienes la impulsamos. No aceptes pensamientos negativos y mucho menos inventes más historias que puedan dañarte. A veces, nos creamos escenarios que no tienen nada que ver con la realidad. Peor aún, buscamos la manera de hacernos sentir peor. Sé positiva y no permitas que lo malo te gane. Piensa en lo maravillosa y valiosa que eres, de esta manera, desviarás tu atención hasta encontrar la solución.
Tiempo al tiempo
Toma el control de tus emociones, no permitas que estas te guíen. Para encontrar la solución, primero debes tranquilizarte y analiza los motivos que detonan tus celos. Luego, estando calmada, platica con tu pareja. Recuerda que la comunicación es esencial para que una pareja crezca. No quieras cambiar de un día para otro, ten paciencia.
